Tenía la mala costumbre de sonarse los mocos en público,
escupir en el suelo, reírse en los entierros, llorar en las bodas..............
Hasta que un día me cansé y se lo dije a su padre.
El padre como era de esperar fue corriendo a decírselo a su madre,
éste se estuvo quejando de la educación que había recibido su hija.
Vamos, que parecía cualquier cosa, menos una señorita.
Así que yo y unas cuantas más, en vista de que no había ningún resultado visible,
fuimos a hablar de nuevo con el padre.
Nos dijo que se había equivocado al confiar la educación de nuestra amiga,
en una mala madre, esposa, amante y criada....
CRIADA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
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